Villarramiel (Palencia). Reside en Madrid.
Promotora, miembro fundador
y Coordinadora del Grupo Literario de Cultural Telefónica de Madrid «Tintaviva».
Miembro del Patronato (letra G) de la Asociación Prometeo de Poesía;
pertenece a la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, Asociación
Cultural y Artística «Grupo Muriel» de Palencia y a la Academia
Iberoamericana de Poesía - Capítulo de Madrid. Subdirectora de la
revista virtual Plataforma Cultural «Raíces de Papel, Preguntas con
respuesta». Distinguida con la imposición de la Capa Española
por la Asociación Cultural Amigos de la Capa de Palencia. Galardonada con
la Cuerva Literaria de la Asociación Cultural Peña Rodense en Madrid.
Le ha sido concedida la Banda de Oro Mujeres Palentinas. Cuenta con abundantes
premios (tanto en prosa como en poesía).
Ha publicado los poemarios
Regreso al pretérito (2001), Regreso al pretérito y otros
poemas (2004), Entresuelo, con el que fue 1º Premio Internacional
de Poesía Cristo de la Nave de Manzanares el Real (2002), La ceniza
del ojo, Accésit Premio de Poesía Villa de Jérica (2005),
48 Horas, Premio Internacional de Poesía Victoria Kent, Algeciras
(2006), De capital pecado o la gracia de pecar, Premio Certamen Internacional
de Poesía Satírica y Artículo Burlón Chumy Chúmez,
y Memoria a Barlovento - Versos de agua (2008). Actualmente está
preparando la publicación de Retrovisor con lluvia, 1º Premio
Manuel Molina 2010 Ateneo Científico, Literario y Artístico de Alicante.
Ha escrito el libro de relatos El día de más luz, (2003).
Su obra figura en numerosas antologías, compilaciones de premios
y revistas digitales. Más información: http://tintavivagrupoliterario.blogspot.com
En
Cuadernos del Laberinto ha participado en la Antología
de poetas contemporáneas ENÉSIMA HOJA.
CANTA A LA PASIÓN Sabes que tiene filo de tijera lunático
complejo de estilete. Es una viva muerte que se mete en el alma tocada de
ceguera. Tiene el rostro pujante de la era, oprime la gavilla, sin que apriete. Apresa
con el más suave grillete y nos llena, vacía y desespera. Encapota
la noche con los sueños de dicha y de placeres rubicundos, prometidos
en sarta de emociones. Maneja los delirios halagüeños: residen
los amantes otros mundos, y pierden entidad las conclusiones. |